martes, 2 de diciembre de 2008

Gemelos Mimados

Eran hijos del profesor borrachín de gimnasia del colegio. Un año mayores que yo. De físico casi casi idéntico. Eran gemelos. Lo único que tenían en común. Según crecían, cada uno adoptaba diferentes estéticas según la "tribu" a la que se adscribían. Pero siempre eran lo antagónico el uno del otro. Eran como la cara y la cruz. Si uno era pijo, el otro punk. Uno hacía surf, el otro iba en monopatín. Uno fumaba rubio, el negro era el preferido del otro. Escogían y desechaban sus gustos con la misma facilidad con la que vivían. Todos los caprichos a sus pies. Decíamos en el patio que uno era majo y el otro un bobo.

Pasó el tiempo y fueron convergiendo en sus apetencias. Cada vez más delgados, con miradas huidizas y llorosas. Con temblores en las manos. La tristeza marcada en sus angulosas caras. Se subieron al mismo caballo. Antesdeayer no sé con quién de ellos me crucé. Le saludé. Me dijo, con la educación intacta y la piel machacada, que no sabía quién era yo. Le dejé y me fuí afectado por su realidad y su olvido. Me duele hoy al pensarlo pero no era cierto lo que decíamos en el patio. Los dos gemelos mimados eran bobos.

No hay comentarios: